El sueño es una parte fundamental de nuestra salud y bienestar. Dormir bien no solo ayuda a recuperar energía, sino también a mantener un equilibrio físico y emocional. Existen complementos alimenticios que pueden ayudar a mejorar la calidad del sueño, pero siempre deben tomarse con precaución y siguiendo las recomendaciones adecuadas.
Arkosueño® Forte 8H https://farmaciajordan.es/producto/arkosueno-forte-8h/
Modo de uso
Este complemento se administra por vía oral y está reservado a adultos.
Se recomienda tomar un comprimido al día, aproximadamente una hora antes de acostarse, acompañado de un gran vaso de agua.
No debe utilizarse en los siguientes casos:
- En caso de alergia o hipersensibilidad a alguno de sus ingredientes.
- Durante el embarazo o la lactancia.
- Junto con alcohol, ya que este puede reducir la eficacia de la melatonina, dificultando la conciliación del sueño.
Si estás bajo tratamiento con antidepresivos, somníferos u otros sedantes, consulta siempre con tu médico antes de tomar este complemento.
No superes la dosis diaria recomendada. Recuerda que los complementos alimenticios no sustituyen una dieta equilibrada ni unos hábitos saludables.
Mantén el producto fuera del alcance de los niños y consérvalo protegido de la luz, el calor (por debajo de 25 °C) y la humedad.
Consejos para mejorar tu descanso
El sueño no depende solo de lo que tomamos, sino también de nuestros hábitos diarios. A continuación, te dejamos algunas pautas sencillas que pueden marcar la diferencia:
Durante el día:
- Aprovecha la luz natural, sobre todo por la mañana. Intenta mantener una hora fija para levantarte, incluso si has dormido mal.
- Evita las bebidas estimulantes (café, té, refrescos con cafeína o vitamina C) a partir de las 16:00.
- Muévete: practicar ejercicio físico ayuda a conciliar el sueño de forma natural.
- Si haces siesta, que no dure más de 20 minutos, para no interferir con el descanso nocturno.
Antes de acostarte:
- Evita las comidas copiosas o difíciles de digerir. Cena con tiempo para hacer bien la digestión.
- Dedica la última hora del día a relajarte, evitando actividades físicas o mentales intensas.
- Apaga las pantallas (móvil, tablet, televisión) antes de dormir.
- Crea un ambiente tranquilo y confortable: habitación fresca, poca luz y sin aparatos electrónicos cerca.
- Acuéstate solo cuando tengas sueño. Señales como bostezos o falta de concentración te indicarán que es el momento ideal.
Si te desvelas por la noche:
Si no consigues dormir, evita quedarte en la cama mirando el reloj o preocupándote. Levántate, realiza una actividad relajante y vuelve a acostarte cuando sientas sueño.
Dormir bien es un acto de autocuidado. Cuida tus rutinas diarias, tu entorno y tus hábitos para disfrutar de un descanso reparador y una mejor calidad de vida.
 
	